Árboles y cambio climático: ¿solución o mito?

Los árboles tienen “superpoderes” naturales como absorber CO₂ a través de la fotosíntesis, convirtiendo los bosques en sumideros de carbono que ayudan a mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) producidas por la quema de combustibles fósiles y otras actividades humanas. Por ese motivo, la conservación de la masa arbórea y la reforestación son estrategias clave contra el calentamiento global y la crisis climática.

En todos los continentes, personas, comunidades y organizaciones han impulsado proyectos para plantar árboles y recuperar los ecosistemas que hacen a nuestro planeta más resiliente. 

Pero ¿podemos delegar tanta responsabilidad en los árboles? En este artículo exploraremos el papel de los árboles en la lucha contra el cambio climático, las limitaciones y retos de plantar árboles como solución y qué más podemos hacer para enfrentar esta crisis. 

Beneficios de los árboles para mitigar el cambio climático.

Conservar y plantar árboles entraría en las “soluciones basadas en la naturaleza”, definidas por la ONU como acciones que ayudan a mitigar y adaptarse al cambio climático restaurando ecosistemas y conservando la biodiversidad. Y es que son incontables los beneficios que nos aportan nuestros amigos arbóreos. 

• Los árboles capturan y almacenan carbono.

Absorben dióxido de carbono (CO₂) de la atmósfera a través del proceso de fotosíntesis, que se almacena en la biomasa del árbol (tronco, ramas, hojas y raíces) y en el suelo, ayudando a reducir la concentración en el aire de este gas. Sin embargo, la deforestación libera grandes cantidades de carbono almacenado, agravando la crisis climática. Los incendios continuos y masivos que estamos viviendo son otra gran causa de emisión de CO₂ en el planeta.

• Los árboles regulan el clima y contribuyen a la conservación del agua.

Los bosques todavía guardan otro as en la manga para ayudar al planeta: regulan el ciclo del agua y la temperatura. A través de la evapotranspiración, liberan vapor de agua al aire, creando nubes y precipitaciones que enfrían la atmósfera y regulan las lluvias. También mantienen la humedad, protegen los suelos contra la erosión y previenen inundaciones. Sin ellos, muchas regiones sufrirían sequías más severas y cambios drásticos en el clima. 

• Los árboles son un refugio para la biodiversidad.

Los bosques albergan alrededor del 80% de la biodiversidad terrestre. Al proteger los ecosistemas forestales, también preservamos especies animales y vegetales que desempeñan roles en la estabilidad ecológica y en la resiliencia climática. 

Limitaciones y desafíos de plantar árboles como solución al cambio climático.

Viendo los beneficios de los árboles, podríamos pensar que plantarlos en grandes cantidades sería una estrategia eficaz, en especial para capturar carbono. Pero no se trata de una solución mágica ni inmediata. Existen desafíos y limitaciones que debemos considerar y también hay que sopesar si todo lo que conseguimos plantando árboles lo destruimos por otro lado. 

Plantar árboles no es una solución rápida.

Un árbol recién plantado puede tardar décadas en alcanzar su máxima capacidad de captura de carbono. Mientras tanto, las emisiones de CO₂ del ser humano continúan aumentando: emitimos alrededor de 40 mil millones de toneladas de CO₂ al año. Para compensar estas emisiones exclusivamente con árboles, necesitaríamos plantar billones de ellos, contando con que los dejemos crecer. Las cuentas no acaban de salir.

No todos los árboles capturan carbono de la misma manera.

Según la ONU, un árbol puede retener hasta 150 kilos de CO₂ al año, pero esta cifra varía según la especie, el clima y el tipo de suelo. Los bosques nativos o primarios son superiores a las plantaciones de monocultivo (como las de eucalipto, pino o palma) en su capacidad de absorber carbono y regular el clima. Pero los bosques están al límite: los científicos han observado que los bosques tropicales van reduciendo su capacidad de absorción.

Plantar árboles no aborda la causa principal del cambio climático.

La verdadera solución radica en reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, junto con otras medidas conjuntas. Si seguimos quemando combustibles fósiles sin control, no habrá árboles suficientes para compensar el daño.

Proyectos exitosos de plantación de árboles en el mundo.

Plantar árboles y conseguir que prosperen no siempre resulta una tarea exitosa. Por eso es una alegría comprobar que hay proyectos que han salido adelante. Estos son algunos de los más ambiciosos, pero existen notables iniciativas a menor escala e, incluso, de personas que repueblan con sus propios medios. Todo ello, sin olvidar la acción de los pueblos originarios, los verdaderos guardianes de las selvas y bosques del mundo. 

• La reforestación de los montes Apalaches (EEUU). Un éxito histórico: desde la aprobación de una ley de reforestación en 1977, se han replantado más de 95 millones de árboles en tierras devastadas por la minería del carbón en esta región que se extiende desde el sur de Nueva York hasta el norte de Mississippi.

• El Gran Muro Verde. Once países de la región del Sahel-Sahara (Yibuti, Eritrea, Etiopía, Sudán, Chad, Níger, Nigeria, Malí, Burkina Faso, Mauritania y Senegal) se han unido para combatir la degradación del suelo y restaurar la vegetación nativa.

• El Proyecto Mombak, en la Amazonía brasileña. Este nuevo proyecto busca transformar praderas de ganado en ecosistemas ricos. Una de sus particularidades es que ofrece bonos de carbono a empresas participantes: una solución no exenta de polémica, pero que está potenciando esfuerzos de reforestación en el mundo.

Los tiny forests: cuando la vecindad, unida, se pone a plantar árboles.

En Ecólatras valoramos el esfuerzo de las comunidades locales, que nos recuerdan que toda acción cuenta cuando se trata de proteger el planeta. Un ejemplo muy inspirador son los tiny forests: pequeños bosques urbanos de especies nativas que plantan grupos vecinales, siguiendo el método Miyawaki, desarrollado en los años 70 por el botánico japonés Akira Miyawaki.

El éxito de estos proyectos de plantación ha trascendido fronteras, y hoy en día podemos encontrar estos bosquecillos todos los continentes. Ecólatras, buscad vuestro minibosque más cercano o cread el vuestro, ¡y no olvidéis presentar vuestra iniciativa en la plataforma!

¿Cómo afrontar el cambio climático con los árboles como aliados?

Estos serían algunos puntos que podríamos llevar a cabo para afrontar el cambio climático, contando con los árboles.

Proteger los bosques existentes.

Detener la deforestación es más efectivo para actuar contra el cambio climático que plantar árboles. Como hemos visto, los bosques necesitan madurar para absorber la máxima cantidad de CO₂ y proporcionar todos sus beneficios ecológicos. Además, la degradación de los bosques y la deforestación están agravando la crisis. 

Fomentar la reforestación responsable.

Plantar árboles es útil si se hace con especies nativas y en los ecosistemas adecuados. Ha habido acciones desastrosas como, por ejemplo, plantar eucaliptos en Galicia, aduciendo su rentabilidad para la industria maderera y su rápido crecimiento. 

Reducir drásticamente las emisiones.

Transicionar hacia energías renovables o mejorar la eficiencia energética son algunas maneras de lograrlo. El Acuerdo de París, adoptado por 196 partes en 2015, estableció el límite de 1,5 grados de subida de la temperatura respecto a los niveles preindustriales. Conseguirlo requiere reducir las emisiones globales de carbono a la mitad para 2030 y alcanzar emisiones netas cero para 2050. 

Cambiar nuestros hábitos de consumo.

Hay sectores que afectan a los bosques y selvas en algún punto de su cadena de producción, desde el alimentario (carne, palma, etc.) hasta el tecnológico o textil. Para exigir a las empresas que actúen con ética y transparencia, nuestros actos de consumo son decisivos. Pero es fácil caer en la trampa del “greenwashing” o lavado verde: las acciones con las que ciertas empresas nos hacen creer, por ejemplo, que no están produciendo deforestación, que la están compensando o que usan los recursos madereros de forma responsable. 

Poner en marcha políticas efectivas para la protección de bosques y selvas.

La ciudadanía puede presionar a los gobiernos para que adopten medidas por la reforestación y la protección de ecosistemas. La entrada en vigor de la Ley de Restauración de la Naturaleza de la UE, con sus ambiciosos objetivos, ha sido un hito sin precedentes. 

Proyectos en Ecólatras relacionados con los árboles y los bosques

Nuestros ecólatras actúan en ámbitos como la plantación de árboles, la sensibilización y el turismo sostenible con proyectos como estos. ¡Apoyadlos con nuestro voto!

• El proyecto Aldea del I.E.S. Carlos Haya (Sevilla) se centra en el aprendizaje sobre los árboles y su cuidado. 

• El Grupo Scout Mayorazgo-Chiclana está plantando árboles nativos en áreas naturales y espacios verdes cercanos.

• Los ecólatras de Navalmedio Naturaleza nos invitan a sumergirnos en la naturaleza con sus baños de bosque.