Bodega Miquel Jané: Enoturismo sostenible en el Penedés

La historia de la Bodega Miquel Jané se entrelaza con la rica tradición vinícola que se remonta al siglo XIX en la idílica región del Penedés, específicamente en Font-Rubí, conocido como el balcón de esta prestigiosa zona vinícola. Nuestra privilegiada ubicación en el altísimo Penedés, a 650 metros sobre el nivel del mar, confiere a nuestros vinos un carácter único. Aquí, el clima más continental y seco favorece unas maduraciones lentas y óptimas, resultando en vinos con una acidez destacada y un sabor incomparable.

En nuestro compromiso con la sostenibilidad, cada paso de nuestro proceso de producción está meticulosamente diseñado para reducir nuestra huella de carbono. Desde el cultivo y cosecha hasta la maduración y embotellado, todo se lleva a cabo en nuestra finca, lo que minimiza considerablemente el transporte y las emisiones asociadas. Además, contamos con extensos bosques autóctonos que cubren el 20% de nuestra finca, proporcionando un hábitat vital para una variada fauna silvestre, lo que contribuye a la absorción de CO2 y al mantenimiento de la biodiversidad local.

Nuestra producción de vinos se rige por estrictos estándares ecológicos y de mínima intervención. Contamos con certificación ecológica europea, sometiéndonos a rigurosos controles para garantizar que nuestros viñedos y bodega cumplan con los más altos estándares ambientales. Además, nuestra finca es alimentada por energía renovable gracias a nuestras instalaciones de placas solares, lo que reduce aún más nuestra huella ambiental. El agua, un recurso preciado, se gestiona de forma cuidadosa y eficiente, ya que toda la finca es de secano.

En cuanto a nuestra operación diaria, nos esforzamos por promover la economía local y la sostenibilidad alimentaria. Nuestro servicio de restauración se basa en productos de proximidad y gastronomía típica de la región, priorizando la temporalidad de los ingredientes. Además, nuestro compromiso con el reciclaje se refleja en el packaging de nuestros productos, utilizando vidrio reciclado y cajas de cartón sin tintes y recicladas.

No solo nos enfocamos en nuestra propia producción, sino que también apoyamos a otros proyectos vitivinícolas locales. Actualmente, ofrecemos nuestra bodega a 20 viñedos de la zona para la producción de sus propios vinos, lo que resulta en una amplia variedad de 63 vinos diferentes. Esta colaboración no solo impulsa la economía local, sino que también evita la proliferación de nuevas construcciones de bodegas, maximizando así el aprovechamiento de los recursos disponibles.

Por último, pero no menos importante, fomentamos el enoturismo como una forma de compartir y celebrar la cultura milenaria del vino. Nuestros cursos de viticultura, enología y cata están diseñados para sumergir a los visitantes en la rica tradición vinícola de la región, contribuyendo a su vez a la economía local y a la preservación de nuestro patrimonio cultural. En resumen, en la Bodega Miquel Jané, la sostenibilidad no es solo un compromiso, es la esencia misma de nuestra filosofía y práctica empresarial.